La Miel cruda ayudaría a bajar la glucosa en sangre en ayunas, el colesterol total, el colesterol "malo" (LDL). En paralelo, aumentaría el colesterol "bueno" (HDL) y algunos marcadores de inflamación.
La MIEL CRUDA no se ha sometido a ningún tratamiento térmico, ni filtrado. Por lo tanto, conserva todo su contenido original de Polen. Sin que se afecten sus enzimas, vitaminas, ácidos orgánicos y características organolépticas naturales.
De una búsqueda de 809 informes se seleccionaron 18 ensayos de alimentación controlados, realizados en 1105 personas que cumplieron con los criterios fijados en las pautas a tomar para este tipo de estudios.
La publicación aclara que los resultados obtenidos no respaldan la consideración general de los formuladores de políticas y de pautas que suelen designar a la miel como un azúcar libre más. Haciendo hincapié que cuando la miel se consume con moderación puede ofrecer una variedad de beneficios en el control glucémico y los niveles de lípidos.
La miel contiene alrededor de un 80 % de azúcar, pero la reducción de la glucosa en ayunas indica que los azúcares raros en la miel moderan el efecto de la fructosa y la glucosa y también pueden proporcionar un beneficio adicional para el control glucémico agudo.
En sus conclusiones resalta la confianza en el efecto del consumo de miel sobre el colesterol bueno, debido a que no se degrada la certeza de la evidencia, lo que sugiere que la evidencia disponible brinda una buena indicación de la capacidad de la miel para aumentar el colesterol bueno (HDL-C).
El mecanismo de acción de la miel estaría basado en su compleja composición.
Donde ácidos orgánicos, minerales, vitaminas, enzimas, proteínas, aminoácidos y sustancias bioactivas estarían influyendo en los procesos cardio metabólicos.
La fructosa, la glucosa en mayores proporciones y la presencia de otros azúcares raros ("monosacáridos y sus derivados que están presentes en cantidades limitadas en la naturaleza"), han demostrado resultados glucémicos beneficiosos a corto y largo plazo.
La publicación brinda como ejemplo la isomaltulosa, un azúcar raro presente en la miel, la que actúa como un prebiótico al promover el crecimiento de Lactobacillus acidophillus , Lactococcus lactis y Saccharomyces cerevisae , que son bacterias asociadas con una microbiota intestinal saludable.
Por otra parte, compuestos fenólicos y flavonoides presentes en la miel, pueden moderar los efectos observados sobre el colesterol total, LDL-C, HDL-C y triglicéridos en ayunas.
Este metanálisis de ensayos clínico sobre miel viene a consolidar el posicionamiento de este producto natural por fuera de la consideración generalizada de vincularla de una forma igualitaria al de los azúcares, especialmente los industrializados.
Sin dudas un material muy valioso que muchos profesionales de la salud vinculados deberán comenzar a considerar.
Fuente: Efecto de la miel sobre los factores de riesgo cardiometabólico: revisión sistemática y metanálisis
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